Feliz cumpleaños Flavia *.*
Bittersweet
Lie
Give me
one more night
I will make things right
I have changed my ways
All I
need is time
Mi corazón amenazaba con salirse disparado de mi pecho, mis
manos no paraban de sudar al igual que todo mi cuerpo, y en mi rostro estaba
estampada una sonrisa desde el dia que supe de esto. Estábamos muy cerca que
podíamos escuchar el sonido típico de un fin de semana con carros de formula
uno, porque por primera vez en mi vida iba a presenciar una ¡¡épica!! Carrera
de F1.
Lauri a mi lado conducía con una paciencia que casi me desesperaba,
me provocaba querer meter mi pie y apretar a fondo el acelerador y así llegar
al condenado estacionamiento de Silverstone, el lugar donde se llevaría acabo la
carrera en Gran Bretaña.
-Babe, sé que deseas que conduzca mas rápido, pero es
preferible llegar sanos y salvos que no llegar.- Lauri tomó mi mano para darme
tranquilidad, y me dedico una de sus miradas dulces.
Me giré para contemplar mejor su perfil, y pude ver una
sonrisa en esos labios que tanto me encantaba besar. Él siempre decía las
palabras adecuadas en el tiempo justo. Vi el tablero del auto y me escandalice,
creía que viajábamos lento pero ¡no tan lento¡, apenas y sobrepasaba los 20 km
por hora, cuando la carretera era para 80 km.
Pero estaba lloviendo y mucho, para mi desgracia. Dejé
escapar un suspiro de frustración y me acomodé nuevamente en el asiento para ya
no pensar en los milenios que nos tomaría llegar.
No tenia porque estar tan desesperada, al fin solo era un
carrera, ¡pero no cualquiera¡, hoy era mi cumpleaños y lo iba a pasar en
grande.
Lauri conocía mi pasión por las carreras pero no sabia que
mi pasión tenia nombre y apellido, bueeeeno, tal vez conocía mi fascinación por
Kimi(era finlandés), pero no al grado de saber lo que él causaba en mi. Solo lo
miraba por las pantallas de televisión, y sus triunfos o despistes los gozaba y
sufría como una real apasionada, por suerte Lauri nunca me había visto ver una
carrera, o jamás me hubiera traído a una, era lo bueno que sus conciertos
fueran por la noche, casi todo el dia dormía y solo despertaba pasadas las 4pm,
cuando la F1 ya había terminado.
Mi corazón latía mas rápido a medida nos acercábamos al
lugar, ya estábamos en el estacionamiento … de lodo, perfecto y yo en mis
botines nuevos. Bueno como decía, no es que fuera tan…tan apasionada a las
carrera, bueno si, tal vez un poquito, pero como no serlo si cada vez que veía
una mi adrenalina estaba al tope trastornando todo mi sistema y Kimi bueno solo
era la cereza del pastel.
No piensen mal, amo a Lauri y obviamente no lo cambiaria ni
por el bizcocho de Kimi, pero uno no todos los días veía a su ídolo formulero
en una carrera, y ni eso me haría cambiar a mi cuervito.
Aunque no estaba segura de si de ser la situación al revés
pasaría lo mismo. Hace cuatro meses cuando mi hermano se casó con Paula ( la
bitch), y se mudaron a nuestra casa porque la de ellos esta en construcción, empecé
a notar ciertas miradas, entre la bitch y mi cuervito, no es de amor ni nada, o
tal vez sean cosas mías, pero se miran como si fueran cómplices de algo que yo
no sé, y eso me mortificó, se lo comente a Eero y él obviamente me llamó loca.
Cuando ella esta con mi hermano se veía por los poros el
amor que decía tenerle, pero entonces cuando Eero no esta a su alrededor y su mirada
caía en la de Lauri, ¡es ahí donde lo veía!, pero eso no es algo que quiera
seguir recordando por ahora, hoy es mi cumpleaños y lo no pensaría en cosas
raras.
El celular de Lauri pitó tres veces, lo que indicaba un
mensaje, me di la vuelta viendo hacia mi ventanilla, para no empezar con mi
paranoia y querer arrebatarle el celular y comprobar que no fuera de la bitch!.
Esperé unos segundos, algo tenia que comentarme del mensaje, y de pronto él
hablo. Era un mensaje de mi hermano, diciéndole que ya estaban en el país. ¿Por
qué diablos no me masajeaba a mi?, bueno…bueno…ellos no tenían blackberry,
ellos solo Nokia usaban.
No entendía porque tenían que venir, a ellos no les gustaba
las carreras, pero tal vez Paula lo convenció y …ok no. Basta!! Basta!!.
-Podemos ir mas rápido?.- tanta melancolía en el ambiente me
estaba haciendo mal, pensando en cosas que no eran ¿ciertas?.- Podrías al menos
subir a 40 km/h?- intente sonar emocionada, pero ya en mi mente estaba la
cadena de pensamientos, de recuerdos, de sus miradas de…
-No, babe.- bajó una mano del timón, para tomar la mía
apretándola suavemente.- Ya vamos a
llegar ten un poco de paciencia, deberías de llevarte mas con Paula, ella tiene
una paciencia increíble para las situaciones.-
Intente por todos los medios posibles del yoga, en hacer
caso omiso a ese comentario, pero el bendito yoga no hizo nada en mi. Sentí
como la furia iba incrementando en mi, ¿yo aprender de la paciencia que tenia
Paula con las situaciones? ¡Oh por favor! , me giré para encontrarme con su
perfil indescifrable pero hermoso.
¿De que diablos me hablaba él?, ¿de que situaciones? Acaso
tenia que tenerle paciencia a Eero? Acaso entonces no lo amaba? acaso solo
estaba teniendo paciencia a sus caricias a su amor, para estar con …con …con…
Respiré hondamente, tomando valor para hacer mi pregunta,
para salir de dudas de una vez por todas, y si él me mentía lo descubriría en
el mismo momento que lo confesara-¿Qué tienes tu con Paula?, ¿es tu amante?.-
La pregunta lo tomó tan de sorpresa que dio un fuerte frenazo,
haciendo que fuera a chocar contra el parabrisas, ya que no contaba con mi
cinturón de seguridad. La luz de un
carro que venia frente a nosotros me hizo apartarme de inmediato del
parabrisas, por temor de …que nos chocara, pero el carro venia en el otro
carril.
El carro estaba detenido, Lauri tenia ambas manos sobre el timón
aprontándolo fuertemente, y su mirada fija en la carretera, intente musitar
palabra, pero nada salió de mi boca, la impresión me había dejado muda. Estiré
mi mano para tocar su brazo y al instante de mi roce él volteo hacia a mi,
dedicándome una mirada angustiosa, y llena de dolor.
-¿Por qué?- susurró en apenas un hilo de voz temeroso, como
si estuviera sufriendo un dolor agonizante. -¿Por qué desconfías de mi?.- volvió
hablar, con su mirada verdosa perdida en mis ojos casi negros, transmitiéndome
su dolor, un dolor que claramente creía yo le estaba causando, pero solo deje
salir mis dudas, nada mas, pero tal parecía como si lo hubiese apuñalado.
-Yo…yo.- su angustia me fue transmitida, y mi voz comenzó a
temblar, a salir llorosa, como si hubieras dio un error preguntar eso. Cerré
mis ojos fuertemente, evitando su mirada, y logrando derramar una lagrima que
no sabia estaba secuestrada en mi ojo.
No fui capaz de contestarle, ni mucho menos de abrir mis
ojos. Él encendió nuevamente el auto y lo puso en marcha, haciendo que me
arrepintiera de mi pregunta, pero nunca me dio una respuesta, solo la evadió
por otra…
-Llegamos – dijo en una voz tan neutra que no pude saber
nada de su estado de ánimo.
Me bajé del carro con extrema lentitud, y cuando llego ante
mi, me sorprendí. Tomándome de las manos llevándolas a sus labios, depositando
un beso en ellas dijo. –Olvidemos todo, y solo vivamos el presente, como si
fuera el ultimo día, ¿si?.- en su mirada bailaba la verdad de sus intenciones y
de su amor, pero entonces porque no me respondió?, porque quiere que
olvidemos?.
-¿Me amas?- pregunté viéndolo fijamente a los ojos para detectar cualquier indicio de
mentira, y cuando respondió vi la cristalina verdad en sus traslucidos ojos.
-Si.-
****
Era una chica razonable, y por hoy, dejaría todo atrás,
disfrutaría de lo que debería ser mi cumpleaños; el mejor día de mi año.
….
Por fin, ¡estaba en
el paddock de silverstone!. Si antes me sentí nerviosa ahora lo estaba mucho
mas, Lauri obviamente había conseguido pases para estar en el box de …¡Kimi
Räikkönen¡ y desde ahí presenciar la carrera, alguien que me agarre porque me
desmayare, ok no.
Tomada de la mano de mi cuervito avancé por entre las
personas, para llegar a nuestro destino. Mientras llegábamos observe a varios
pilotos que en vivo se miraban muy..pero muy bien, por ejemplo, Jenson Button
ufff, o Sebastian o inclusive Alonso y ni se diga de Hamilton (el enemigo), y no
lejos el mejor de todos, Kimi, sin querer apreté de mas la mano que me unía a
Lauri, pero como evitarlo si a pocos metros estaba ese ¡hombre¡.
Lauri detuvo su paso y se giró hacia mi para susurrar en mi
oído con su melódica voz.- Si quieres, adelántate, anda ve, yo te sigo.- me
quede sin habla, no quería llegar corriendo ( es lo que anhelaba) pero tampoco
quería llegar con el paso que íbamos, al final de la carrera llegaríamos.
Le di un beso en sus labios, solté su mano y camine en
dirección del box de Kimi. Tenia miedo de desmayarme en el trayecto ahora sin
el soporte de mi amante, pero …oh my gosh!! Kimi era mucho…muchísimo mas
hermoso en vivo que por esta tonta pantalla de televisión que no transmitía a
su plenitud su belleza.
Era un hombre hermoso, en toda la extensión de la
palaba, y lo mejor de todo es que me
estaba viendo, ¡¡oh my gosh!!, que alguien me auxilie ¡por favor!.
A medida me iba a
cercando a él, podía visualizar mejor su semblante, no tenia ni un ápice de
querer sonreír, pero ni le hacia falta, y sus ojos ¡ojos hermosísimos¡ estaban
sin esos lentes y me veían fijo, ¡a mi!, quería correr aventarme a sus brazos y
…solo eso, pero nop, tuve que mantener la compostura pues habían muchos ojos a
nuestro alrededor.
Di un fuerte suspiro cuando por fin llegue a los escasos
centímetros que nos separaban.-Hola, mucho gusto mi nombre es …Flavia.- me
presenté, y pude escuchar como mi voz me traicionó y sonó demasiada entusiasta,
pero ya no podía seguir ocultando mi emoción.
Él tomó mi mano, la cual había extendido para él, y oh my
gosh, su mano le dio un choque eléctrico a mi corazón, uff tenia que respirar….
-Bienvenida, ponte cómoda y disfruta del circo.- soltó mi
mano, y paso por mi lado, así sin mas, como si, ¿como si que?, ¿qué esperaba
acaso¿ ¿ qué me diera un fuerte abrazo y un beso en mi mejilla que dijera lo
emocionado que estaba de tenerme como espectadora en su box?.
Tonta!!...que tonta si pensé que él haría eso, pero …al
menos una sonrisa por lo menos no?. Me giré para saber que era lo que lo había
apartado de mi lado y casi me voy de espaldas, Kimi estaba saludando a mi
cuervito como si fueran ¡grandes amigos!, ¿de que me había perdido?.
Rápidamente me fui hasta donde se encontraban pero me detuve antes de
interrumpirles, ya que ambos estaban hablando en fines, y yo sabia de eso lo
que un bebé puede leer.
Ambos reían y muy fuerte, como si estuvieran contándose
anécdotas, y por primera vez en mi vida tuve deseos de ser un hombre, mejor
dicho de ser un finlandés, y no una venezolana no parlante finesa, cuanto me
arrepentía en esos momentos de no querer aprenderlo cuando Lauri me lo ofreció
y en repetidas ocasiones.
Mis ojos se encontraron con los de mi cuervito y creo
percibió mi tristeza porque rápidamente extendió su mano para llegar a su lado,
la tomé con gusto pero sin querer ir, porque sabia que al instante que lo
hiciera él ya no seria tan espontaneo por tener que hablar en un idioma que no
era de su agrado.
****
La carrera había iniciado y con ello la acelerada carrera de
mi corazón también. Estábamos sentados muy cerca del box, es mas solo tenia que
levantar mi cabeza y podría ver en vivo el pit stop.
Creo de todos los que estaban a mi alrededor era la que mas
alboroto hacían cuando lo intentaban pasar o ganaba posiciones, pero no me dejé
inhibir por nada, yo estaba disfrutando al máximo y si ellos no celebraban, no
apoyaban verdaderamente a Su Piloto,¿ o estaba en el lado equivocado, en el de
Grosjean?.
-Oh my gosh!....¡ segundo lugar!.- grité cuando paso por
debajo de la bandera a cuadros. Brincaba,
hacia mi bailecito de felicidad, todos me veían raro pero yo seguía brincando y
celebrando su segundo lugar, no quiero ni pensar lo que hubiera hecho de haber
ganado la carrera. Phew!!
Me detuve un momento mientras todos corrían hacia el podium,
¿Dónde estaba mi cuervito?. Miré a todos lados, pero sin rastros suyos, es como
si hubiese desaparecido de pronto, o bueno tal vez y me dijo y me lo hizo
notar, pero a lo mejor lo hizo mientras alguien intentaba ganarle la posición a
Kimi. Oops!.
Le mandé un mensaje de texto, preguntándole donde estaba,
llegó la respuesta pero en ese instante los tres ganadores subieron al pódium y
automáticamente me olvide de todo y todos, concentrándome mirar hacia arriba
donde estaba Kimi en su esplendor.
****
La marea de personas se estaba esparciéndose rápidamente,
por lo que me devolví al box, junto con los demás mecánicos, quería ver la expresión de Kimi con ellos, los que habían contribuido a su
posición en el pódium. Revisé mi celular y solo era un mensaje en respuesta de
la compañía, pero de Lauri no tenia señales.
Se quito su overol a escasos metros de mi, obviamente ni se
percataba de mi presencia, ni de la de nadie, estaba conversando con otro
hombre de pelo rubio. Se trato de peinar esa melena dorada rebelde por el sudor,
le pasaron una toalla con la que secó su sudor, miró lejos del hombre rubio
haciendo un barrido visual, luego regresó la atención la hombre con el que se
carcajeo y luego se dio la vuelta y oh my gosh! Nuestras miradas se
encontraron.
-Fiesta en el lugar de siempre a las 11 PM, todos están invitados, todos.-
dijo mirando a todos los mecánicos y por ultimo otra vez a mi. ¿estaba invitada
yo también?, oh my gosh!! Donde diablos estaba Lauri para presenciar tremendo
acontecimiento?.-
Me acerque a unas mujeres de Lotus para ir con ellas, porque
yo no tenia las llaves del carro, solo
Lauri, ¿acaso se había marchado y no me
había esperado?, entontes ¿por qué no contestaba mi teléfono?, ay!! Me
desesperaba no saber donde estaba.
Mientras iba en el carro de la peli roja, la mas emocionada,
me debatía si debía haber venido con ellas o esperar a Lauri en el paddock,
pero …¡Era mi cumpleaños! E iba a tener mi fiesta de cumpleaños, nada mas que
con Kimi Räikkönen!, así que el remordimiento se me pasó en un segundo, además
la conversación que ellas llevaban adelante del coche era mas interesante e
intrigante.
Al parecer habían ido a todas las fiestas de Iceman, y las
estaban comparando, cual había sido mejor, o en cual habían compartido mas
tiempo con él. Todo daba indicar que era un picaflor, aun cuando ya contaba con
su esposa, ¡pobre Jenni!, no quisiera esta en sus zapatos, (no completamente).
-Y tu de donde lo conoces?.- me tomó de sorpresa cuando la
peli roja, Shopie me pregunto viéndome por el retrovisor del espejo.
-Yo….mi novio es su amigo, es finlandés.- bueno no había
sido una mentira completamente, amigos ..amigos, no eran, pero si paisanos y
con buena química desde que se vieron.
Shopie me sonrió de vuelta, logrando tener la atención de su
amiga, que se volvió para verme mejor, como si fuera la primera vez que se
percataba que iba también en el automóvil.-Oh te recuerdo chica, eras la que
gritó cuando pasó a Hamilton, si que te apasionan las carreras o …- vi la
malicia en su mirada, pero no iba a decir nada de lo que su sucia mente estaba
maquinando.
-Me encantan las carreras, y obviamente le voy al equipo
Lotus.- en mi mente al decir equipo me refería solamente a Kimi, porque como
todos en el paddock, cada quien velaba por sus intereses y parecía que por Kimi
ni el mismo manager del equipo le iba a su favor.
-¿Y donde esta tu novio?.- dijo Shopie, llamando mi
atención. Eso mismo me preguntaba yo, ¿dónde rayos estaba Lauri¡? y ¿era verdad
que Eero y Paula también estaban en el país?-
Oh bueno, no importa, lo pasaras mucho mejor sin él, conocerás lo que es
una fiesta de Iceman.-
Eso ya me estaba dando miedo.
****
Llegamos a una mansión que gritaba dinero, por fuera nadie
supondría que había una fiesta, pero por dentro, casi me voy de espaldas,
parecía un carnaval de Brazil, incluido con ese tipo de mujeres. Oh my dios!!
Donde vine a caer!!
Me adentre en la fiesta, todos tenían una copa en su mano,
por lo que fui por una de ellas. Mientras degustaba de lo que parecía ser un
delicioso vodka, deje vagar mi mirada por el lugar, fijándome en todos y
buscando a uno solo, pero sin poder encontrarlo. Bebí de un solo sorbo de lo
que quedaba de mi copa y cuando la terminé opte por otra bebida.
Revisé mi celular y aun no había respuesta de mi mensaje,
entonces lo llamé, desde la piscina, donde me encontraba ahora; con copa en
mano, para poder hablar con él, pero no me contesto, salto de un solo hacia la
contestadora, eso no me gustó, él nunca apagaba su celular, a menos que…
-Bu!- una voz masculina dijo tras de mi, dándome el susto de
mi vida, haciendo que botara la copa que traía en mi mano.
Me giré para observar al individuo tan maleducado que me
había asustado para reclamarle, pero cuando lo vi, las palabras se las llevo la
emoción.
Era Kimi, quien se encontraba con un semblante divertido y
vestido casual pero sensual. Controla
tus hormonas Flavia!!.
-Oh!! Eres tu.- dije inocentemente con una sonrisa tan
grande en mi boca, que tenia miedo de que llegara a mis orejas.
-Me buscabas?.- esperó una respuesta de mi, pero tampoco iba
a ser tan obvia, por lo que no le conteste.- Me pareció que lo hacías cuando
entraste a la fiesta, o me equivoco?.-
Olía a licor, oh si!! El niño estaba bien tomado, pero no se
le notaba.
¿Se equivocaba?, nop!!.- Buscaba a mi novio, desde el inicio
de la carrera ( creo) no lo veo, y pensé encontrarlo aquí, pero tal parece que
no.- mentí, en parte, también lo busque a él, pero ya secundariamente.
-Pequeña mentirosilla, pero no importa que me mientas, todos
lo hacen a mi alrededor, que mas da si tu lo haces también?.- auch!! Que Iceman
tan rencoroso.
-No mentía.- dije haciéndome hacia atrás, cuando vi que el
avanzo un paso hacia mi. No sabia porque estaba afuera conmigo, en vez de estar
dentro con la fiesta casi brasileña.
-Me comentaron que celebraste mucho mi segundo lugar,
gracias, aunque solo es eso un segundo lugar, el primer perdedor de la
carrera.- su olor natural mezclado con el del licor estaban inundando mis vías
aéreas, trastornando mis sentidos. Puse una mano en su pecho para evitar aun
mas su acercamiento, que ahora parecía un acorralamiento de hombre.
Él bajó la vista hasta su mano, extrañándose de que la haya
puesto, elevó su vista azulina y me miro
tentadoramente.- Y esa mano en mi?.- sonrió de medio lado, luciendo así
mas bello de lo que ya era. –Acaso tu crees?.- y dejo escapar una carcajada
como si hubiera dicho la cosa mas graciosa del planeta, a lo que eleve mi
perfecta ceja a lo máximo. ¿se estaba burlando de mi?.
-No Flavia, no pienses mal pequeña, solo estorbas mi camino
hacia la piscina, apártate por favor.-
un tic comenzó aparecer en mi ojo derecho, ¿había escuchado bien? ¿yo le
estorbaba?, pero lo mas importante de esto, ¿él recordaba mi nombre? OH MY
GOSH!!!.
Me hice a un lado, aun incrédula de lo que acababa de escuchar,
y él me rozo tambaleándose para llegar al borde de la piscina. Ni por un
momento eso había sido accidental, él estaba tomado si, pero no borracho,
aunque quisiera dar esa apariencia.
Introdujo un pie para comprobar la temperatura del agua,
pero dudaba que eso le importara, era escandinavo. Se quito la camisa negra que
contrastaba con su piel nórdica, y a continuación se empezó a desabotonar su
pantalón beige, acaso …..yo…iba a presencia eso?.
-Te quedaras ahí espiando o…vienes a jugar conmigo?.-
Auch!!!si…siiiiiiiiiiiiii.-No, obvio que no.-
Se encogió de hombros, como si mi negativa le diera igual y
se bajó los pantalones, a lo cual me tendría que haberme ido del lugar, pero
tal parecía que mis pies habían tomado vida propia y no podía moverlos.
Se irguió y vi en la poca ropa en que quedo, un diminuto
bóxer negro y sus zapatos. Un bonito y pequeño bóxer era todo (y sus zapatos)
con lo que se encontraba Kimi frente a mi. Quise gritar de frustración, pero yo
era fiel hasta la muerte a mi cuervito, sin importar la carne frente a mi,
tan…tan…bizcochona.
Se quitó los zapatos en un rápido acto y luego se zambulló
en un perfecto estilo, que hizo que doblara mi cabeza para tener mejor ángulo.
A los pocos segundos salió a la
superficie del agua, peinando su despeinada melena, sonriéndome con la extensión
de sus dientes blancos y esa mirada lobuna. auuuuu!!.
-Ven Flavia, que no muerdo, vive la noche, disfruta un
poco.- y tras decir eso se volvió a sumergir en el agua, nadando lejos de mi,
privándome de su presencia.
¿Acaso estaba soñando?, en que vida paralela me iba a pasar esto a mi, esto definitivamente era
un sueño, del cual no quería despertar, y con eso en mente me quite mi ropa en
un santiamén y me tire sin nada de estilo al agua.
Agua que estaba CONGELADA, que penetro en lo mas profundo de
mi ser, despertando cada fibra de mi cuerpo, o era el karma por estar aquí con
Iceman y no con mi cuervito, karma is a
bitch.
-¿Rica no?- dijo de pronto Kimi, asustándome por detrás. Me
giré para encararlo con la peor expresión de enojo que podía tener, pero que al
encontrarme con sus ojos, se me olvido hasta lo que le iba a decir. –Yo creo que te gustó, no lo
niegues.-
-Bueno, esta congelada, gracias por avisarme, pero…porque ya
no eres el cara dura que conocí en el paddock?.- nadé un poco lejos de él,
ocupaba recuperar mi espacio personal, lejos de sus feromonas.
-¿Vez coches de F1 por aquí?.- negué con mi cabeza
inocentemente.- Yo tampoco, aquí estoy para disfrutar, no para entretener a la
prensa o al público.
Él nadó siguiendo la misma ruta que usé yo, por lo que me
tuve que mover lejos, mas lejos que él, pero que fue casi imposible escapar de
sus grandes brazadas, dándome alcance y acorralándome contra la orilla.
-¿Por qué me huyes?, tu novio no está por aquí, déjate
llevar, y disfrútalo cumpleañera.-
Oh!! No, no veía a mi flamante novio desaparecido, pero…¡ un momento ¡ en que momento le dije yo
de mi cumpleaños?.- ¿Cómo lo sabes?.-
-Un pajarito me conto, Onnea Flavia.- dijo en su fines tan
sexy. Tirándome un poco de agua con su mano, hacia mi rostro.
-Gracias pero… aléjate un poquito no, estas casado.- intente
por todos los medios posibles alejar de mi mente como seria tener esos labios
en los míos, o mis manos acariciando esa melena dorada.
-¿La vez por algún lado?, ¡porque yo no!.- gritó, alejándose
por mi, -por fin- nadando con fuertes brazadas.
Me quede en mi lugar, pensando en lo diferente que era este
Kimi, del que todos conocíamos, no era un Iceman parecía un fireman, bueno con
el alcohol en su sistema además.
Nadé hasta las gradas que estaban cerca de mi para salirme
del agua, estaba congelando mis hueso, pero antes de salir me percate que mi
bóxer negro de encaje se había reducido de tamaño, eleve mi vista para ver
donde estaba ahora, hmm lejos pero no tanto para no ser capaz de ver mi casi
desnudes.
-Adelante, por mi no tengas pena, huye del agua gacela, y
deleita mi mirada pequeña.- dijo con en tono jocoso.
Cual pena. Me levante con mucho impulso y Salí corriendo en
busca de mis ropas que estaban esparcidas por la grama. –Eres un deleite
Flavia.- obviamente me puse roja, pero no le di el gusto de verme sonrojar.
Mientras me cambiaba pude escuchar que él también salía del
agua pero a diferencia de mi tenia una bata de baño para cubrirse. Una lastima.
El poco silencio que habíamos generado me hizo darme cuenta
que ya no podía escuchar el bullicio de la fiesta, parecía como si se hubiese
terminado y los únicos habitantes ahora de la mansión éramos solo nosotros. Me
giré para preguntarle y sacarme de la duda, pero quede en shock cuando vi lo
que estaba haciendo, por debajo de su bata blanca se estaba quitando la única
prenda de ropa que cubría ese cuerpo; su bóxer ahora yacía tirado en el césped.
Oh my gosh!!.
Casi corrí lejos sentándome en la silla de metal que estaba
cerca de la puerta por la cual había entrado, quise ver hacia adentro pero el
polarizado me lo impidió, ¿acaso era verdad que éramos los únicos aquí?.
Me devolví al frente para encontrarme con que Kimi se
acercaba con paso seguro y confiado hacia a mi. -¿y la fiesta?, parece que ya
se termino no es así?.-
-No sé de que me hablas, lo único que sé es que estoy aquí
afuera con una morena que endulza mis ojos.- evité el contacto de sus ojos con
los míos, yo no iba a caer en la dulce
tentación de su cuerpo o de sus labios, no, aunque muy muy pero muy en el fondo
de mi subconsciente persevero y maligno lo anhelara.
Se dejó caer junto a mi, apenas rozando mi hombro con el
suyo, recostándose hacia atrás elevando su cabeza para ver el cielo, imite su
postura y la luna se veía realmente grande, parecía una noche para hacer cosas
impensables.
-¿Por qué estas aquí conmigo?.- me atrevía a preguntar ahora
que nuestras miradas estaban concentradas en contar las estrellas.
-¿Por qué tu estas aquí conmigo?- me devolvió la pregunta. Sinceramente
no sabia, Lauri no estaba por ningún lado, y no quería perderme de la fiesta,
pero extrañaba mi cuervito, saber que andaba por ahí, con …con ….¿será acaso
que anda con Paula por ahí haciendo quien sabe que cosas?
Él no dijo nada ni yo tampoco, no sé cuanto tiempo duró el
horrible silencio entre los dos, hasta que él lo rompió hablándome de su perro,
y luego de cosas mas y mas triviales de las cuales estaba segura nadie sabia.
Pude descubrir el lado amable y serene de Kimi, no el que
siempre aparentaba ser ante todos, este era diferente y me gustaba mas.
No sabia que hora era, pero suponía debería ser muy tarde,
mis ojos se sentían cansados al igual que todo mi cuerpo, pero me rehusaba a
retirarme de su lado y perderme mas detalles de su vida.
Me tomó por sorpresa cuando tomo mi mano ente la suya,
logrando despertarme con su solo toque. Me reincorporé en el helado césped
donde estábamos acostados ahora, para ver su rostro, el cual solo estaba
cubierto por picardía.
-¿Qué quieres de mi?.- preguntó sentándose frente a mi.
-Nada.- pero respondí muy rápido, que ni sabia si era
mentira o verdad. Amaba a Lauri mas que a nadie pero …Kimi me gustaba y estaba
empezando a temer de mi propio temple para mantenerlo apartado de mi. Si no
conociera a Lauri (en otra vida claro), aceptaría lo que él me propusiera, lo
que sea.
-Ya va a amanecer, veo que estas cansada pero espera un
momento, será lago maravilloso.- no tenia porque decir que lo seria, porque lo
sabia, con solo estar frente a él, ya era grandioso.
-¿Lo amas?-
-Lo amo, y tú ¿la amas?- tal vez solo era una pregunta banal
en el aire, pero era mas que eso, si amaba a Lauri.
-No..- su sinceridad me tomó por sorpresa, ni en un millón
de años espere que me dijera algo así.
Giró su rostro hacia el mío, elevando sus manos para
dejarlas en mi rostro, enmarcándolo gentilmente. Podía acostumbrarme a esto,
pero era mentira, todo era mentira, una que había creado solo para satisfacer
mis mas recónditos deseos, o no?.
-¿Estoy soñando?, porque no pareces real, nada de esto lo
parece.- me sentía emocionada y enojada conmigo misma al mismo tiempo. Si
llegaba a caer en al tentación que tenia ante mis ojos estaría engañando a mi
cuervito, pero…¿no estaba haciendo él lo mismo?, …engañándome.
Una inexplicable tristeza me invadió de pronto y un profundo
dolor en mi corazón también, no estaba correcto hacer lo que Kimi quería hacer,
pero a lo mejor era solo lo ideal dada las circunstancias.
-Abre los ojos Flavia, no voy a besarte, no aun.- dijo con
entusiasmo. No sé porque los había cerrado, tal vez, si quería que me besara y
olvidarme de lo que tal vez estaba aconteciendo mas allá de la mansión.
Me tomé la libertad de tocar su rostro también, de
explorarlo con mis yemas de los dedos y tomar nota en mi mente, porque seria un
recuerdo que guardaría para siempre; el día de mi cumpleaños 29 lo había pasado
con Kimi.
Su pelo era tal como me lo imaginaba, era como tocar la
seda. Su piel tan suave que competía por la textura de su pelo. Llegué a sus
labios, finos y rosados, subí mis dedos hasta su nariz, sus parpados…
-Ya esta por amanecer, prepárate pequeña, para ver algo
inimaginable.
Traté de girar mis ojos para ver hacia el horizonte que
teníamos frente de nosotros, por donde el sol nacería, pero las manos que Kimi
aun mantenía en mi rostro me lo impidió, acercándose, eliminando la distancia
entre nosotros, a la vez que posaba sus labios sobre los míos.
Mis ojos aun estaban abiertos y pude ver por el rabillo de
mi ojo la luz tenue del sol naciente, mientras que la boca de Kimi se apoderaba
de la mía, haciendo que olvidara hasta como me llamaba, derrumbando mis
murallas.
El sol me cegó, por lo que tuve que cerrar mis ojos y tras
hacerlo lo escuché:
-¿Por
qué?- susurró en apenas un hilo de voz temeroso, como si
estuviera sufriendo un dolor agonizante. -¿Por
qué lo hiciste?.- dijo otra vez esa voz tan melosa que siempre solía cantar
para mi. Pero no lo decía a la par mía, no, era como un recuerdo de mi mente
que se escuchaba claro.
Los labios de Kimi intentaron alejarme del sonido de su voz,
pero su pregunta aun seguía danzando en mi mente.
La voz dulce volvió hablarme
tratando de arrancarme del presente. -¿Porque desconfiaste de mi?- y
supe que no debía estar en los brazos de
Iceman. El derrape de un carro me saco del dulzor de mi fantasía, logrando que
abriera mis ojos, cegándome el sol de inmediato, pero no era el sol, no, el sol
no irradiaría una luz tan blanca y cegadora, esa era la luz de un auto que
venia directamente hacia mi.
-Flavia!!.- gritaron mi nombre llorosamente, como si el decirlo
lo desgarrara por dentro, pero sin saber quien lo gritaba, desconcertándome de lo que
estaba pasando, yo debería estar en el césped junto a Kimi…Kimi…¡él había
gritado mi nombre! ¡Debía ser él!, devolviéndome de mi pesadilla, sacudiéndome
efusivamente para hacerme reaccionar.
-¿estas bien?.- intente abrir mis ojos pero no pude, los
sentía demasiado pesados para hacerlo. Y solo asentí con mi cabeza, a lo que él
agregó-Me alegro, porque yo no.- de inmediato su respuesta me desconcertó.
-¿Cómo?-
-No, en que mundo crees que yo pasaría mi día junto a ti?,
porque en este no.-
Y un sonido de gran estruendo escuche al instante de sus
crueles palabras, logrando cambiar el ángulo de mi cuerpo, chocando contra algo
duro en mi espalda, doblándome completamente en una posición casi inhumana.
-¿Por qué desconfiaste
de mi? – volvió a decir Lauri en un suspiro, obviamente dolido por mi duda,
pero también por el vidrio que atravesaba su pecho.
-Flavia!!- gritaron otra vez, pero sin saber en esta ocasión
quien era el que lo gritaba. No podía concentrarme, no cuando Lauri yacía junto
a mi, frente al timón del carro, con el parabrisas incrustado en su pecho.
Me intente mover, pero sin conseguirlo, él aun respiraba
lentamente y tenia abiertos sus ojos viendo su pecho y repitiendo las mismas
palabras que llevaba diciendo. La desesperación se apodero de mi, él no podía
morir, no así, ¡no frente a mi!.
-Por qué, si lo único…que hice fue amarte…- dijo casi como
si doliera decir las palabras, moviendo su cabeza para verme, cuando nuestras
miradas se encontraron vi el horror en sus ojos y entonces comprendí, porque no
podía hablar…porque no podía moverme, porque no podía decirle que me perdonara
por haber desconfiado de sus intenciones o de sus actos, ya no estaba ahí para
responderle.
-Es inútil, ya no tiene caso.- alguien dijo. Alguien lejano
a nosotros dos, lejanos a la tragedia en la que estábamos inmersos.
-No!!- la misma voz que antes escuché, gritó, como si lo
estuviesen torturando.
Sus ojos comenzaron a llenarse de agua, y quise imitar ese
acto. Elevó su mano para tocar mi rostro, y cuando llegó, solo no lo sentí, fue
como si no me hubiese tocado, como si no estuviera…
-Esta muerta.-
-Noooooo!.- y entonces reconocí la voz, era la de Eero, la
que lloraba y gritaba mi nombre.
Pero entonces porque podía escucharlos aun, no estaba
muerta!!, inténtenlo una vez mas, pongan esa cosa en mi corazón, ¡por favor!
que alguien me lo ponga, no quiero morir,¡ no puedo morir!, no aun, tengo que
decirle a Lauri que no desconfiare nunca mas de él, que me perdone que…nunca
quise besar a Kimi que… que…
-Ahora ambos estarán juntos, ten resignación amor.- y la
rabia se apodero de mi, era ella, ¡era su voz!, Paula le estaba consolando de
mi perdida a mi hermano …de…de…¿juntos?, no…no…solo yo, él estaba bien, yo lo
vi…yo…
Entonces lo recordé, su pecho, el vidrio, su voz, su dolor,
su silencio .¡oh no!, la impotencia de no poder moverme me estaba volviendo
loca, quería pararme, gritarle a todos que estaba viva que…que… nada de esto
estaba pasando que…que.. solo había estado en la mansión de Kimi, en el paddock
en la carrera en… en….cual quier lugar menos aquí.
-Entonces levántate.- alguien me susurro, una voz que me
heló y caló por cada parte de mi cuerpo, sin saber a quien pertenecía ese
timbre de voz.
-¡No puedo!- grité llorosamente.
-Solo levántate.- dijo tan sereno, como si fuera la cosa mas
fácil del mundo. Pero le hice caso y para mi sorpresa lo pude hacer.
Ante mi vi a Eero casi sobre mi llorándome, junto a él una
Paula sufrida y lo mas importante, junto a mi cama estaba otra en la cual yacía
un Lauri pálido o mejor dicho azulado.
-no!! No!! No!! No! No!! No!!.- mis ojos se nublaron
opacando mi visión.
-Ve.- me ordenó esa voz.
Y le hice caso, pero me percate de otra cosa, al moverme también
me vi y casi me desmayo de cómo me vi. Mi cara estaba intacta, pero en mi
cuello había una gran herida que iniciaba cerca de una de mis orejas y
terminaba en la otra, como si alguien me hubiese cortado la garganta.
-Exacto, te cortaron la garganta, el otro carro lo hizo, he
de decir que fue muy triste, pero no sufriste.-
Esa voz ya me estaba hartando, logrando acabar con la poca
paciencia que aun había en mi, pero tal vez me merecía lo que me había pasado,
si no hubiese abierto mi bocota desconfiando de él, no hubiera frenado de
pronto deteniéndose en medio de la calle a la espera del derrape del otro carro
que se impacto contra nosotros. Oh my gosh! Eso es lo que había pasado, el
carro no nos pasó como creí, el carro se había impactado contra nosotros antes
del gran premio…de mi encuentro con Kimi, de mi beso de…
-Es raro ver como funciona el cerebro, y tener el poder de creer lo que no es verdad.-
Yo…yo…yo…mori en el carro, junto a Lauri…justo cuando él me
vio.
El conocimiento de tal verdad, me rompió por dentro,
logrando retirar la evidencia del dolor de mis ojos, pero que nunca las llegue
a sentir rodar por mi rostro…estaba llorando por el simple hecho de querer
hacerlo, mas no de poder hacerlo.
-No¡…no!...no!!..- me abalancé como si el viento y yo fuéramos
uno solo y me tire sobre el cuerpo inerte de Lauri.-No!...no!! no puedes
morir!!...Lauri…amor mío!!
Perdóname!!!...perdóname!!...Lauri!!.
-La sorpresa que tanto se esmero por darle, jamás será
conocida.- Paula susurro contra el hombre de Eero. –Lauri estaba muy
emocionado, llevábamos meses planeándolo, es lo bueno de ser finlandeses, todos
se conocen, Flavia se iba a morir de emoción, pero ahora murió de verdad, tan
joven…y en su cumpleaños.-
-Las cosas pasan por algo.- Eero dijo mas para consolarse
que otra cosa.
No.!..no!!.. no era una sorpresa! Claro que no!! No podía ser…no
podía…no podía!! Esas miradas no podían ser de un secreto que guardaban para mi…no
podía ser cierto…claro que…no.
-Solo viste lo que quisiste ver, como siempre…creando una
mentira y viviendo en ella.- esa voz sin rostro y cuerpo volvió hablar, exasperándome
mas de lo que ya estaba, recalcándome que había sido mi culpa.
-No!!...Lauri…no…no…yo voy a cambiar, no dire nada, no
dudare de ti, de tu amor, no..nunca…pero no te vallas.- rogé contra su cuerpo,
sin poder sentirlo bajo mis manos.
-Ven.-
-No!! No quiero irme, quiero estar con él…no me puedes
alejar de él.- dije llorosa contra su sabana entre mis labios que apretaba o lo
intentaba hacer.
-Es hora.-
-No!...no quiero…-
-Pero si te quedas solo…serás nada…-
-Lo prefiero, no quiero ir a un lugar donde …donde sea
infeliz.-
-Entonces vive en tu mentira…-dijo como si odiara haber
dicho esas palabras, destilando rencor…¿hacia mi?
-Tampoco!!!, yo solo quiero estar junto a él.-me aferre a su
pecho, con toda la fuerza que ya no estaba en mis brazos.
-Entonces acepta lo que te toca.-
-Y eso es?...-dije dudando de su oferta inexistente.
-Ven y descúbrelo.- y su voz tuvo un rostro y un cuerpo…uno
conocido, uno amado.
-Lauri.-
FIN
----------------------------------------------------------------------------
Lauri conduciendo hacia el Gran Prix de Gran Bretaña
Kimi Räikkönen en el box
Esperando por Flavia, a que llegue a su box
Kimi en boxer!!
"Ven a mi"
Eero Bello!! ( chico tropicaliente de Finlandia)
Kimi en la fiesta ¬¬
No es normaaaaal, no es nada normal esta historia!! Quedé enganchadísima apenas leí el primer párrafo y luego de allí no pude parar de leer…
ResponderEliminarPero antes de emitir cualquier comentario lleno de emoción y felicidad completa!! Quiero agradecerte querida Dane por este magnífico regalo de cumpleaños!! De los mejores que he recibidoooooooo!! Waaaaaaaa casi bailo de la emoción (música brasileña de la fiesta de Kimi de fondo)
A ver, es que hay tantas parte que me gustaron que no se ni por donde empezar…
“¿De que diablos me hablaba él?, ¿de que situaciones? Acaso tenia que tenerle paciencia a Eero? Acaso entonces no lo amaba? acaso solo estaba teniendo paciencia a sus caricias a su amor, para estar con …con …con…”… Flavia es definitivamente una celopata!! Que psicosis! Yo con un hombre como Lauri a mi lado estaría mas que feliz!! Sin ningún tipo de reproches, con razón… ahora por sus celos tontos van a morir!... pobre de Lintu, tan hermoso que fue al prepararle esa sorpresa y viene ella y lo arruina todo!!
Ahora lo entiendo todo… Su mente no fue capaz de superar ese fuerte choque, y sencillamente evadió la realidad. Flavia imaginó que llegaron como si nada a Silverstone, se bajaron del auto con normalidad y Lauri fue con ella… como si nada hubiese pasado, supongo que el saludo entre Lauri y Kimi también fue producto de su mente, ella anhelaba tanto tener algún tipo de nexo con Kimi que sencillamente imaginó que su precioso cuervo era amigo del sueño de sus fantasías… pero la verdad es que ellos realmente ni se conocían.
Y luego… él le dice “adelantate babe, que yo te alcanzo”, se aleja sin explicación alguna (y es porque simplemente él debe irse a otro mundo), mientras que ella aun permanece en este sin aceptar su realidad. Se imagina cualquier cantidad de intercambio de miradas intensas con el rubio mientras están en la carrera, todo producto de su imaginación… ella no quería morir sin al menos haber probado los finos y helados labios del Iceaman… quizás solo necesitaba eso para morir en paz. JUAAAAASSSSSS!!
ResponderEliminarLos momentos en la piscina… wowww Dane te pasasteeee de la rayaaaaa!! Y pobre cerebrito no podía soportar semejantes imágenes tan sexiessss!!! Ese pedazo de hombrezote crocanteee en boxers aaaaahh!, y nada mas de imaginármelo quitándose la ropa de esa manera tan sexosa… NOOO!! Osea directoooo al hospitaaal!!
Y luego cuando ambos estaban en la piscina! Oohh por dioosss, ese Iceman resiste hasta las mas bajas temperaturas, aunque Flavia pudo haber entrado perfectamente en calor con semejante bizcochazooooo!! Uufff solo faltó un abracito o una caricias bajo el agua! Y Flavia hubiese caído en sus redes!
Ahora ya en el césped no puedo aguantarse!! SE BESARON!! SE BESAROON!!! Aaaaahhhhhhh imaginé todo!!!... que lástima que como todo buen hechizo, dura hasta el amanecer.
Es que todo fue perfectamente maquinado, ella intentó varias veces comunicarse con Lauri y él no daba signos de vida (obvio porque él ya estaba muerto y ella no quería verlo)…
Cuidaste perfectamente los detalles querida! Jajajaja me risa que mencionaras que yo uso blackberry y Lauri Nokia (obvio como un buen finlandés que ama su país). Que tonta fue Flavia al no tener la suficiente intuición para darse cuenta que lo de Paula y Lauri era simplemente cariño de paisanos!... Me dio tanto dolor cuando narras la muerte de Lauri, sus gritos, su voz, su dolor, el parabrisas encrustado en su pecho y el bañado en sangre, NOOOO!!! Sufrió mucho durante su muerte!... en cambio la muerte de ella fue rápida y sin dolor, tanto así que nisiquiera se dio cuenta! Juuummmm
ResponderEliminarDane te juero que amé esta historiaaa!! Me encantó!... A pesar de todo tuvo un final feliz, Flavia y Lauri ahora estarán juntos para siempre… a pesar de que su hermano lamenta su muerte y que realmente nunca pudo conocer a Kimi (aunque ella lo imaginó TODO)
Ahora si!... la sección que mas me gusta! Las preguntaaaassss!!!
¿Eero también es venezolano como yo?
¿Finalmente cuál era esa sorpresa tan genial que habían preparado Lauri y Paula para Flavia?
¿Por qué fokitos Flavia no aceptó aprender finlandés con Lintu?
¿Kimi realmente no ama a Jenni, o todo fue producto de la imaginación de la niña?
Aaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh lo amé!! KIIIIITTTOOOOSSSS DANE!
By the way, ese nuevo apodo FIREMAN le sienta de maravilla!! Jajaja super guapo, melena dorada, sin sonreir, ególatra y talentosísimo!... ♥
Aw!! me alegro, que te haya gustado...
Eliminarahora con las preguntas...
Eero, nop, no es venezolano, lo que pasó es que su familia adopto a Flavia, cuando era un bebé, y se la llevaron a vivir a Finlandia.
La sorpresa era, que como Paula conoció recientemente a Jenni, habia conseguido un encuentro con Kimi, y bueno todos los acompañantes, casi así como el sueño utopico de Flu..
Porque fokitos no lo hizo?, porque cada vez que Lintu le intentaba ensañar, siempre iniciaba con la palabras de amor, y luego un beso y luego un punchis-punchisbody hehehhee
Todo fue producto de la imaginacion de Flavia ...no la ama con locura, pero tampoco tan descarado es, aunque...
ENN LA VIDA REAAl, se rumereá que estan separados, luego que Kimi se fuera de una fiesta con 4 chicas a su casa, olvidando completamente que vivia con Jenni ya casados, y ahi ella los encontro infraganti OMGª!!!...
Se me habia olvidado! esas fotos que pusiste!
ResponderEliminarhospital directo!!! nada mas de imaginarme a Kimi esperándome en el box o a Lauri conduciendo a mi lado... NO ES NORMAL!
Jejejeje es un placer y un deleite leer tus historias Dane!!
ResponderEliminarMuyyyyyy bonita, triste pero feliz tu historia!!
Al final tuvo un final feliz!!!
Love it <3
k hermosa historia aunk k mal k flavia
ResponderEliminarguera tan celosa x sus celos prdio lo k mas
amaba aunk al final se reunieron d nuevo
pro k mal k tuvieran k morir para k c
diera kuenta k l la anaba d vdd
sigue kon mas historias komo esas
k aki star sprando x mas historias
byebye cuidate
atte: angeline O:-)
ncrio mmm bueno pues happy brithay!!!
ResponderEliminary komo eres?
Al menos se quedaron juntos 😭😭😭
ResponderEliminar