12 Tentada Por Segunda Vez
Lykia (p/v)
Lilu había llegado al hotel desorientada, al día siguiente, lo ultimo que recordaba era estar en el concierto y después todo era negro. Le dije que no se había perdido de mucho, y que próximamente saldríamos a otro concierto. Aunque era mentira porque jamás volvería asistir a uno.
Volvimos a Finlandia, dejando atrás Rusia, dejando atrás mi amor, dejando atrás mi tristeza. Pero algo no podía olvidar, el estaba vivo, quería saltar de alegría pero a la misma vez, quería llorar de tristeza.
Había transcurrido ya un mes desde el incidente en el hotel. Y desde esa fecha no lo había vuelto a ver jamás, ni en sueños ni en vivo. Pero asi era mejor, quien lo diría… aun estaba vivo, pero claro el no es un chico normal después de todo.
Lo vi en sus ojos rojos, el ya no me amaba, lo mejor que podía hacer era tratar de sacarlo de mi corazón tal como el ya lo había hecho.
Lilu me había visto muy decaída, las ultimas semanas y me propuso mudarme a su casa por una temporada hasta que estuviera mejor de animo, acepte sin poner objeción, era verdad, estar en mi casa, en “nuestra casa” ya no era una opción, ya no ahora que todo había acabado entre nosotros, antes era diferente porque el pensar que estaba muerto, mi casa era un refugio perfecto para recordarlo siempre, pero ya no mas.
Suspiré…
El lugar donde vivía Lilu era grandioso, arboles por doquier, y no muy lejos quedaba el mar, aunque habían pocas casas en la región, me explicó que su vecino mas cercano estaba de viaje, y que era muy apuesto, y simpático. Me prometió que cuando estuviera de regreso me lo presentaría.
Pero ya no quería pensar en conocer nuevas personas del sexo opuesto, me había propuesto darle una oportunidad real y verdadera a lo mio con Jari, el no se merecía que siempre que él me estuviera besando en mi casa, me traicionara la mente y pensara en Lauri, en lo que habíamos vivido ahí.
-listo. De aquí no te marchas hasta que te vea feliz y radiante ok?.- dijo Lieluz, dejándome sola en mi nueva habitación. Que era perfecta, justo como había querido, vista al mar, aunque desde esta casa era mas lejano, apostaba lo que fuera que desde la casa del vecino de Lilu se vería perfecto, y eso lo tenia que ver.
Me acerque a la otra ventana, y desde ahí podía ver la casa del vecino, era espectacular, parecía como un palacio medieval, cubierta por hermosos arboles muy grandes, tenia demasiadas ventanas, y además al costado de la casa, donde solo podía ver la mitad, había una gran terraza, y obviamente se utilizaba para ver el mar…
Que hermosura de hogar!!.
Abrí mi maleta y desempaque lo mas rápido posible, tratando de ordenarla poca ropa que había traído conmigo, no quise traerla toda, tampoco iba a vivir eternamente en esta casa, aunque el ambiente era un paraíso.
No me había dado cuenta, pero la hermana pequeña de Lilu había entrado a mi habitación, era tan hermosa, e inocente, pero por alguna razón estaba enojada, lo podía ver en su carita en forma de manzana, sus ojos azules parecía que iba empezar a llorar en cualquier momento.
Me puse en pie y fui rápidamente hasta el borde de la puerta que era donde ella estaba. Le pregunte que le pasaba porque estaba enojada, quien la había hecho enojar.
-tu.- respondió Kiana. Corriendo a la ventana que miraba hacia la casa medieval.
-kia, ven acá y dime que hice yo.. porque no entiendo.- me acerque a ella, y juntas miramos el mismo punto a la distancia.
-este era mío… mío.. mío… cuarto mío…. Eno.. no, yo duermo en otro mas bonito que este, pero este era mioooo mioooooo…
-cálmate… y explícame como es que tienes dos cuartos?.
-no tengo dos cuartos!!!!! Solo uno!!!- grito fuerte Kia, alejándose de mi, y yendo hacia la cama.
-pero… desde aquí es el único lugar donde yo miraba a el…-
-oh!!! Ya entiendo .. al vecino bonito?.-
-no es bonito!! Es mas que eso, el es mi Ken. No tuviste a ken nunca??.. no sabes que bello que es…-suspiro, se coloco sus manitas en su rostro y cerro sus ojos, creo se lo estaba imaginando.- ya bote todos los demás que tenia.- dijo sonriendo de oreja a oreja.
-tu Ken…-lo medite un poco, analizando sus palabras. Su ken?. Ahhh el esposo de barbie!!...
-sip.!! Mío!!! Pero es el novio de esta tonta de Lilu…sabes le pregunte un montononon de veces, como la besaba el, para asi hacer lo mismo yop, y esa mala no me lo dice…- hizo un puchero en su boca.
-Kiana!!!!.- Lilu había entrado al cuarto sin que nos diéramos cuenta y a ambas nos asusto su grito.- ya te dije mil veces que no andes diciendo que el es mi novio, noo tengo novio!!.- respiro profundamente y continuo.- Kiana, no molestes mas a Lykia, vete a tu cuarto si¿-
-oh ya veo!! Lilu que escondido te lo tenias picara, asi que también te gusta “ken”.-
-quien?.- pregunto sorprendida ella.
-digo tu vecino, asi lo llama Kiana, dice que es su ken.-
- ahh Kia, sabes que boto todos los Ken que tenia, porque dice que ninguno se le llega a comparar con su Ken de ensueño. La hubieras visto hablar ese dia, si es que nos dio un cátedra de todo lo bello que era su ken.-
No pude aguantarme mas y me rei, Lilu me siguió con una carcajada.
Jari me había llamado, quería que pasáramos la tarde juntos, y claro que acepte. Al encontrarnos fui de lo mas cariñosa con el, todo lo que el me proponía le decía que si. Tenia que empezar una nueva vida, dejar de sufrir por alguien que … no merecía esto.
El quiso conocer donde vivía ahora, lo lleve a la casa de Lilu y al igual que yo, el también quedo sorprendido por el lugar tan relajante tan pacifico. Subió hasta mi cuarto no se por cuantas horas se quedo ahí, ambos abrazados, recostados en la cama un poco grande para mi gusto. Yo se que Jari quería algo mas de mi, pero no estaba preparada para dar ese paso con el, no todavía.
Al día siguiente, toda la familia de Lilu nos propuso hacer un camping a la orilla del mar, que prácticamente era de nosotros, nunca se veía a un turista o algún vecino, inclusive Lilu me conto que su vecino tampoco lo había visto por ahí jamás.
Era perfecto el clima, el mar tan azul, la arena debajo de mis pies, el viento soplando levemente a nuestro alrededor. Habíamos estado casi todo el día aquí, comimos, descansamos debajo de unas sombrillas grandes, y entre otras cosas que la mamá de Lilu había traído.
Era tiempo de irnos pero yo no lo quería hacer, me sentía en paz. Tomé una toalla la puse sobre la arena y me recosté sobre ella. Lilu me advirtió que no me quedara dormida, y que si en dos horas no volvía ella volvería por mi. Le agradecí su atención, y todos se marcharon quedándome completamente sola.
Desde aquí se veía mas cerca la casa medieval, y como lo había imaginado la terraza miraba al frente hacia el mar. Que hermoso ha de ser despertar todos los días y poder ver el amanecer desde la comodidad de esa casa. Borre ese tonto pensamiento al instante.
Creo el sol ya me había pasado la cuenta, y estaba delirando. Me volví a recostar, solo escuchando las olas del mar. Me estaba quedando dormida cuando sentí, gotas de agua que caían sobre mi, al principio creí que eran gotas de lluvia. Abrí mis ojos, y que bueno que estaba acostada por que de lo contrario me hubiera desmayado.
Me senté para ver mejor ese pedazo de hombre, las gotas provenían de su perfecto cuerpo mojado, y de sus.. OH MY GOSH!! Sus alas negras. Su cara tan bella con rasgos muy finos y a la vez masculinos, tenia la línea de barba marcada muy sutilmente que lo hacia ver mas irresistible, sus ojos azules como el mar que me miraban sin perder detalle de mi. Su pelo largo, mojado, sobre su cara.
Y su pecho desnudo gritaba sensualidad.
Baje la mirada y me encontré con un lienzo negro cubriendo sus partes, se miraba como si llevase falda, pero muy por dejado del ombligo casi a la línea de la pelvis. Por un momento pensé que un viento muy fuerte dejaría caer ese pedacito de falda y quedaría al descubierto todo su ser.
Me sonroje, pero no era para menos, no todos los días se miraba a … podría decir un dios escandinavo tal vez?. Tan cerca de mi, y en esas tremendas condiciones, ese hombre era un ataque cardiaco andante.
No podía dejar de verle sus alas, eran tan bonitas, al final de cada pluma brillaban como si tuvieran brillantina, aunque claro ahí si ya estaba alucinando un poco. Él no hablaba ni yo tampoco, se movió un poco y yo me paralicé a un mas, se agacho hasta hacer contacto visual frente a frente, y me tomo por la cintura para ponerme en pie.
Olía condenadamente delicioso. Como a lavanda, cerezo y canela, tuve el primitivo impulso de abrazarlo, e inhalar mas profundamente y cerca su aroma, pero gracias a mi poco autocontrol me contuve.
-hueles a él, todo tu cuerpo huele a él.- me elevó mas arriba, quedando mi cintura muy cerca de su cara.- y también dentro de ti.- concluyó.
Que diablos estaba haciendo él conmigo?, y que estaba diciendo de mi?. Quien se creía que era para levantarme asi como si nada.
-que??? Huelo a quien?, que te pasa?, he estado todo el dia aquí, y por cierto hoy me bañe, cosa que hago a diario.-me estaba empezando a enojar, por muy sabroso que se mirase, no le daba derecho a decirme esas cosas.
No se porque le estaba dando explicaciones, pero no me gustaba la forma en que me miraba, si, porque lo estaba haciendo de arriba abajo, como si pudiera ver algo en mi, que no se veía a simple vista.
Trate de soltarme de su agarre pero imposible, era como tratar de salir de una roca, que estaba alrededor de mi cuerpo. Deje de insistir y esperaba que el se cansara de tenerme sostenida por encima de el.
-porque te preferiría a ti humana?.- dijo el, pude notar tristeza en sus bellos azules y sensualessssssss ojitos.
-de quien me hablas?.- no tenia ni … oh!! Alas!! Bellos!! Perfectos!! Oh Lauri.
-Lintu, se llama Lintu, no Lauri.- me corrigió , ante mis pensamientos erróneos. Ohh esto era perfecto, leía mi mente… mis pensamientos…. Oops!!! Mis más secretos y pervertidos pensamientos… este cretino divino los había leído. Perfecto… solo perfecto..
Creo mi comentario no dicho le causó gracia, porque curvo sus labios en una leve sonrisa. Que??? Sonriendo levemente se podía ver mas devastadoramente sensual…. Hormonas contrólense. Si??. Podrían??
-pero te equivocas, no puedo oler a él.. como tu dices porque hace muchooo muchooo tiempo no lo veo ni me ha tocado.- que era cierto casi mas de un mes, que no lo veía, y no es que me hiciera mucha gracia no verlo, descubir que estaba vivo, hacia que mi corazón quisiera vivir otra vez, pero al parecer él no esta vivo para vivir por mi.
-no niegues lo que mis ojos ven, humana pervertida.- sonrió, y volvió a ponerse serio, uhh de cualquier forma se miraba exquisitamente, serio, alegre, triste, daba igual.
No pude decir nada ante su comentario soez, por que era verdad. Rabia!!!sigan asi hormonas tontas y estarán castigadas de por vida.
-estas equivocado angelito… caído…- angelito de cielo no podía ser, porque sus bellas y elegantes alas eran negras, sonreí para mi.
-todo tu cuerpo tiene la esencia misma de el, y obvio para un ser humano es algo imperceptible, pero claramente, fuiste marcada como suya, porque si no, no hubiera dejado tanto de él, sobre ti.-dijo las palabras con desprecio. Se alejo un poco de mi, miro hacia el mar, tratando de ver el horizonte. Creo.
-quieres decir como si se hubiera… hmmm orinando en mi?.- que otra cosa podía pensar.
-tonta. No hables de esa forma de sus lagrimas.-claro estaba algo, no le gustaba hablarme de las cosas personales de esa región, el no darme la cara lo decía todo.
Cuando Lauri había llorado en mi?, que yo recuerde jamás!!, si era verdad lo que el decía, tenia que ser otra cosa.
-nuestros fluidos no son simples y comunes como los de un ser humano. Dan olor de si mismo, sobre quien han sido derramos, tu por ejemplo: se hace mas fuerte en tu pecho, donde me imagino fue donde lloro, y entre tus piernas hay una gran cantidad de olor.
-imposible.. bueno lo de las piernas..- me sonroje un poco, y mi corazón empezó a latir mas rápido.- paso hace mucho tiempo… años atrás…-mi mente estúpida, me llevo a ese dia, o claro!! como me encantaba eso, pero… había sido un sueño que me pareció ser muy real.
-si hubiera sido un sueño no lo estaría percibiendo de ti. Y aunque pasen mil años seguirás con su esencia hasta el dia que muera.-se detuvo, tratando de buscar una explicación mejor, me acerque a el, tratando de verle de frente y ahora lo miraba.. bueno sobre mi, porque era alto.- y tiene sentido, porque en Korppi, nuestras mujeres no tienen poderes, y si se encuentran con algún ser masculino que quisiera quedarse con ella, olería al instante la esencia de otra deidad, y se daría cuenta que pertenece a alguien mas, y por ende, si se metía con dicha mujer tendría graves problemas, creo somos muy territoriales con nuestras mujeres.-
Sonrió con su blancos y perfectos dientes para mi?. Por que a lo lejos escuche un aleluya?.
-creo ustedes las humanas son mas sensibles a nosotros, y mas ahora que estoy como un ser de Korppi y no en un caparazón humano, de donde vengo, también causamos cierta debilidad en mujeres de otros hombre es algo inevitable, pero esta en nosotros en no responder ante lo que ellas anhelan.-
Acaso yo anhelaba algo de ese chocolatito blanco, cremoso, y oloroso?
Para nada!!!
De veras?... que mentirosa tan descarada era, hasta a mi propia conciencia le mentía. Pero dejemos claro algo, no era yo, eran mis hormonas, dos mundos diferentes, o no?.
-alto, no entiendo una cosa, se supone que ustedes tienen a su mujer ok, ahí entendí, pero si ella ve a otro y el la acepta que, ella engaña a su “marido” solo porque se le antojo?, y es que acaso se casan sin amor?.-me acerque mas a el, enarque una de mis cejas, esperando su respuesta.
-lo que hay entre nosotros es deseo, solamente eso, y amor… hmm primera vez que escucho esa palabra, de donde viene?, que significa, habla.-se alejo de mi, ahora el agua tocaba sus pies, y el poco sol que quedaba, resplandecía ante su imagen.
-como dices?, que no sabes que es amor?, ahh ahora entiendo porque tienen que andar marcando a sus mujeres como su propiedad, si no se aman de verdad, para jurarse fidelidad.-todo esto que estaba diciendo me hizo pensar en lo que tuve con Lauri… él tampoco me amó?, fue mentira las veces que me lo dijo? Por eso me había marcado como una … puta.
Y sin querer recordé, el dia del camerino, que asi fue como me había hecho sentir, como una puta barata. Mis ojos ardían, quería llorar, pero me contuve y no las deje salir. Me había prometido a mi misma no volver a llorar por su causa.
Él solo me miraba. Apostaba lo que fuera que estaba leyendo mis memorias, porque cambiaba de expresión muy rápido, del asombro, al enojo.
-que haces aquí?. Quien eres?- le pregunte, me aleje un poco de el, no confiaba ni un segundo mas en mis hormonas.
El no dijo nada, tan solo seguía viéndome, como si fuera una cosita nueva, y tratando de averiguar el botón de apagar y encender.
Ahora de pronto lo tenia muy cerca, otra vez, embriagándome con su aroma tan exquisito. Me miro fijamente a los ojos, sentí que mis manos querían tocar ese torso desnudo, y secarlo con mis manos, o mi boca.
Lykia?? Que nos pasa?... uhfff tengo que respirar, respirar, corazoncito mio, relájate.. relájate…no corras tan rápido..
- no te preocupes Humana, no te daré nada, de lo que tus locas y traviesas hormonas quieren.-elevo una de sus cejas, y me dedico creo yo, su mas devastadora sonrisa. Y continuo hablando o susurrando?- porque estaría cavando mi propia tumba por no saber reconocer el olor de otro que no es cualquier otro, es el mismísimo rey, mi primo.- y dicho esto, desapareció de mi vista, en un momento lo tenia muy muyyy cerca y en el otro se había ido. Puff!! Asi como si nada.
Su primo?... bueno no cabe duda que son familia, son extremadamente hermosos, pero Rey?.
Y que quiere con migo?, porque vino a buscarme precisamente a mi?. Bueno si ya se, Lauri me marco como su putita andante, pero y es que todos ellos de por allá, podrán olerlo de mi.. ahhh Lauri, espero no volverte a ver…
No podía decir que jamás!! Por que aunque me duela reconocerlo, si lo quería volver a ver, me moría de ganas de volverlo a ver.
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